El secretario de Estado ha afirmado que esta Alianza "contribuye a reducir las tensiones abordando las causas subyacentes de los conflictos, promoviendo sociedades inclusivas y fomentando partenariados con la sociedad civil".
Valenzuela ha resaltado la necesidad de involucrar más a la sociedad civil, a los jóvenes, a las mujeres, a los líderes religiosos, a las corporaciones y a los medios de comunicación en iniciativas que promuevan el diálogo entre culturas.
España considera que en el ámbito de la educación es esencial promover el desarrollo de las mejores prácticas a nivel nacional y local y considera que la creación de redes de expertos en educación y la elaboración de una "Guía de Buenas Prácticas en Educación y Diversidad para la Integración Social" fomentaría el conocimiento de prácticas que se han revelado útiles en los distintos países para promover la inclusión.
También se ha destacado que la mujer puede contribuir al respeto de la diversidad cultural y a la resolución de conflictos desde una perspectiva de tolerancia.
Para el Gobierno español son fundamentales también los "Objetivos de Desarrollo Sostenible" por lo que la Agenda 2030 incluye la promoción de sociedades pacíficas e inclusivas entre uno de sus objetivos principales, y el diálogo intercultural es una dimensión del desarrollo.
"Para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible se debe abordar con éxito el desafío de construir sociedades inclusivas y diversas en términos culturales. No es posible construir una paz y una seguridad duraderas sin un desarrollo sostenible y equitativo", en opinión de la delegación española.